Posted on 12 Julio, 2011 | No Comments
Con casi 20 años de vida en la Universidad, el Centro de Investigación de la Comunicación sigue siendo un espacio de referencia nacional para la investigación y la producción, científica y académica de la comunicación social y la cultura en el país, en los ejes temáticos de Tecnologías de Información y Comunicación; Comunicación Política y Libertad de Expresión; Historia y Memoria del Periodismo; Medios y Representaciones Sociales; y Periodismo Popular.
“En el CIC somos un equipo multidisciplinario, que colabora entre sí. Solo así podemos funcionar porque somos pocos y tenemos muchas responsabilidades. Cada profesor coordina una línea de investigación que tiene relación con su área de experticia, pero todos discutimos, evaluamos y tomamos decisiones en conjunto. Y además contamos con la asistencia de los beca trabajo, que realizan una labor muy valiosa”, comentó Mabel Calderín Chacín, investigadora especializada en sistemas de información documental.
Desde el centro se destaca el esfuerzo aplicado en un ambicioso proyecto emprendido en 1995: la Red de Información y Documentación en Comunicación y Cultura (Recom), una iniciativa de la Unesco para conformar una red mundial de documentación centrada en la comunicación y la cultura de acceso público.
“Para el proyecto Recom, debido a su compleja confección, se han probado diferentes sistemas de gestión de bases de datos, y hemos desarrollado aplicaciones para incorporar colecciones especiales de documentos históricos, archivos personales o hechos tan relevantes como la violación al derecho a la libertad de expresión en los medios nacionales”, alegó Calderín.
Esta red masiva, actualmente, ya cuenta con tecnología dinámica para la gestión de contenido en red, con una interfaz gráfica novedosa y servicios de colaboración en línea que potencian la interactividad entre usuarios individuales y corporativos desde cualquier parte del mundo.
Un futuro promisorio
Según sus autoridades, para los próximos años el CIC estará dedicado a rediseñar y reorganizar todos sus productos en formato digital, con modelos de gestión en línea para consolidar la organización del conocimiento social.
Además, Calderín afirmó que desde el centro quieren aumentar sus esfuerzos en la formación de comunidades virtuales y multidisciplinarias de investigación; la participación en colaboratorios de estudios sociales; y la integración definitiva a diferentes redes académicas latinoamericanas que trabajan al día con los últimos avances de la investigación electrónica.
Bajo nuevas técnicasde financiamiento
Hasta la fecha desde el CIC se han finalizado nueve proyectos financiados por la Ley Orgánica de Ciencia, Tecnología e Innovación (Locti), recientemente reformada. Entre éstos destacan Saber Ucab (evolución del Recom), la Unidad de Digitalización y la Colección Histórica de la Prensa del Siglo XIX y del Siglo XX.
“La puerta de la Locti aún no la consideramos totalmente cerrada. Tenemos diferentes vías de financiamiento y esa no parece estar agotada. Insistiremos mientras sea posible”, concluyó Calderín.