Posted on 28 Febrero, 2011 | No Comments
Seis de cada diez estudiantes han tenido contacto con las drogas. Hernán Matute, profesor de la escuela de Derecho, instó a los universitarios a evitar el consumo de narcóticos
La Cátedra Libre Antidrogas (Cliad) es una ONG que nació en 2003 como una iniciativa para sensibilizar a la población ante el problema de las drogas y trabajar por su prevención en el ámbito educativo. Con sede en el Instituto Pedagógico de Caracas, la Cliad tiene presencia en 21 universidades del país y en 207 colegios y liceos de la Gran Caracas.
Estudios realizados por miembros de este movimiento sostienen que seis de cada diez estudiantes con edades comprendidas entre los 11 y los 25 años han tenido contacto directo con las drogas. El profesor de la escuela de Derecho y presidente de la cátedra, Hernán Matute, sostiene que uno de los principales motivos por los cuales emprendió la creación del Cliad es que, para él, estas cifras demuestran la necesidad de que las instituciones educativas tomen medidas propicias para la prevención y el control del consumo de drogas.
El símbolo de la organización es un lazo de color azul rey que representa la prevención antidroga y ha logrado obtener reconoci-miento nacional e internacional.
Su campo de acción está en los colegios, liceos y universidades. En los primeros, solicitan la participación de un profesor, algunos estudiantes voluntarios y un miembro de la junta directiva de padres y representantes. “Descubrimos que es importante involucrar a la institución para que haya continuidad”, explicó Matute. En la mayoría de las universidades trabajan con grupos de voluntarios en alianza con algunos centros de estudiantes. En el Instituto Pedagógico, el tema ha sido asignado en una materia obligatoria con tres créditos.
El Cliad en la Ucab
En nuestra Universidad, la Cátedra Libre Antidrogas funciona con un pequeño voluntariado al cual Hernán Matute les ha dado certifi-cación y membresía. Él se ha dedicado a ayudarlos e impulsarlos, pero asegura que de ninguna manera les hace el trabajo.
Matute advierte que la Ucab no está exenta de la realidad nacional y que espera que las autoridades se sensibilicen ante el tema de la droga y tomen nuevas medidas de prevención en el campus.
Un asunto de interés público
Tras la realización de investigaciones en el tema, Matute asegura que la droga “es el flagelo que más degrada a un estudiante porque afecta su rendimiento físico y psíquico y le genera una enfermedad: la adicción”. Además, califica el problema de las drogas como “un asunto de interés público”, porque ha demostrado que de cada cinco personas que tienen a alguien cercano que consume, tres terminan siendo consumidores y, además, de cada diez delitos o hechos punibles, siete son cometidos bajo efectos de narcóticos o con el fin de obtener dinero para comprarlos.
Para Matute, “todo aquel que se acerca a las drogas se acerca a cinco tipos de muertes distintas: la muerte física, la muerte neurocerebral, la muerte de la libertad, la muerte social y la muerte de los sueños”. Por este motivo invita a los ucabistas a evitar a toda costa el consumo y a dedicarse a obtener verdaderos placeres como la obtención de un título universitario y la realización de las metas personales.